apoderado de tantas iglesias. Es una especie de narcisismo cuasicristiano, de amor a uno mismo, que caracteriza a los falsos maestros, según 2 Timoteo 3 que nos recuerda: «En los postreros días vendrán tiempos peligrosos. Porque habrá hombres amadores de sí mismos» (véase 2 Timoteo 3:1–2). El cristianismo, en las manos de algunos dirigentes de iglesias que se acomodan al que busca, se ha convertido en un movimiento de «logre lo que quiera» en lugar de ser un movimiento de «abandónelo todo». Estos
Page 7